viernes, marzo 01, 2013

¿Dónde está la oposición?


Cuando uno lee la prensa y las redes sociales colombianas siempre se encuentra con el problema de las verdaderas opiniones de la gente, es decir de la "visión del mundo" que las anima, y entonces sale claro que todos son "demócratas", pero cada uno entiende el término a su manera, y no vacila en considerarse "demócrata" el que justificaría el genocidio de los judíos porque la mayoría de los alemanes lo aprobaron (en realidad no tuvieron ocasión de aprobarlo, pero para el caso no importa).

Verdaderamente quien considera "democracia" a los regímenes que imperan en Europa y Norteamérica y a cualquiera otro que se les asimile, y falsa democracia, por decirlo de un modo amable, a cualquier otro régimen, está en absoluta minoría. Recientemente en Twitter discutí con un radical que no vacila en llamar a la rebelión contra Santos pero que, en defensa de la página de Juan Lozano (¡el portal para la paz!), promovida desde la cuenta de Twitter de Uribe, me señaló que la negociación de "paz" era legitimada por los tres poderes, como queriendo decir que no es lícito oponerse a ella.

Es sólo un ejemplo de algo que predomina: la confusión moral e ideológica del conjunto de la sociedad, que no se rebela contra el régimen golpista porque tiene lealtades personales con gente que se lucra de él y se inventa pretextos de lo más delirantes, como que los partidos no tienen que ver con las ideologías y el problema de que el presidente del Congreso, del Partido Social de Unidad Nacional, diga que es preferible tener a Timochenko en el Congreso que "repartiendo bala" no afecta a los valores de la gente que pertenece a su partido. Verdaderamente no son mucho mejores que las FARC.

Dentro de ese orden de indecencias llama la atención el pretexto idiota de que es mejor no dejarle la U a Santos, gracias al cual se colabora con el golpista y con su componenda con las FARC al tiempo que se buscan votos para Augusto Posada y Roy Barreras, que son los que pueden asegurarles el puesto a ellos mismos o a sus parientes o amigos. Esa forma de "encauzar" el descontento es tan perversa como todas las falacias de los socios de los terroristas.

En el mismo orden se puede incluir la advertencia del representante Miguel Gómez Martínez:
Muchos creen que Chávez nos ayudará con el proceso de paz, pero la verdad es que apoyará a la guerrilla en este.
¿No se incluye él entre los que participan en ese proceso de paz? ¿O a quiénes "nos" ayudará o dejará de ayudar Chávez? La negociación, digo yo, es una componenda entre criminales y no puede ser legitimada por ningún demócrata. ¿Cuál es la verdadera actitud del representante Gómez Martínez respecto del proceso de "paz"?

La confusión llega al extremo de que todavía hay que explicarle a todo el mundo que las FARC y el ELN sólo son el Servicio Doméstico Armado de las castas que se apropiaron de las universidades desde los años sesenta, organizadas como "izquierda". La columnista Paloma Valencia no vacila en afirmar que: 
Me quedé esperando algún ejemplo de representantes de esa izquierda democrática. Yo no recuerdo a ninguno. ¿Alguien me podría orientar, dado que esta columnista no me contestó?

En fin, el descontento puede tener muchas causas pero no se materializa en nada porque no hay consensos mínimos y la mayoría de la gente comparte en gran medida el ideario de las FARC: ya he explicado en otras partes el rechazo que despierta la idea de cerrar las universidades públicas para dejar de gastar el dinero de todos en adoctrinar terroristas (las quieren cambiar como quieren cambiar al PSUN o el Partido Conservador, como si éstos no fueran sólo las redes de poder de sus dirigentes). Más característico es el apego a la llamada "acción de tutela" que es tal vez el más atroz de todos los disparates totalitarios de la Constitución de 1991: ¡es tan conveniente para el gremio de abogados! ¿Qué importa convertir las leyes y los contratos en papel mojado?

Entonces el rechazo a Santos se aferra a cualquier pretexto. La reforma de la educación superior, que el golpista abandonó porque se le manifestaron los estudiantes, tenía aspectos positivos, pero no faltaron los supuestos opositores no comunistas que la rechazaron. Mucho más grave fue la adhesión a las protestas del vicepresidente Angelino Garzón porque se cambiaran los criterios de medición de la pobreza. Ahí se colabora con la causa de los terroristas, que siempre quieren mostrar más pobreza de la que hay, medida con los mismos criterios de los demás países, para justificar la violencia política (y ése era el único motivo de las iras del vicepresidente).

Otro tema de rebelión contra Santos en las redes sociales fue el cambio de la moneda. También me parece una disposición correcta. Dicen que serviría para lavar los millones que los terroristas tienen encaletados, pero ¿dónde está la explicación rigurosa de ese proceso? De por medio se va dando por sentado que el país debe tener una miniatura de moneda cuya unidad no se puede acuñar sino con un gran costo (cada peso valdría mucho menos de lo que cuesta acuñarlo).

No pretendo agotar la discusión sobre estos temas, sólo registrar esa tendencia a criticar cualquier actuación del gobierno porque respecto a las cuestiones importantes no se tienen nociones claras.

En ese mismo orden de cosas caben las protestas contra la reforma tributaria que promueve el ministro Cárdenas. Da lo mismo que se les explique que no se aumentará el recaudo sino que se librará a los empleadores y empleados de una carga que ciertamente a nadie se le ocurriría en un país civilizado. ¡Hay que criticarla! Si realmente dejaran de cobrar impuestos a los empleadores por contratar gente y se aplicaran a los salarios altos de los empleados estatales, lo más probable es que se encontraran con la resistencia de las FARC y sus representantes en el gobierno, pero a la banda le ayudan muchos críticos de Santos que, insisto, pronto sueñan con un golpe militar o con la resurrección de las AUC sin por eso dejar de suscribir toda clase de reconocimientos a la infame negociación de Santos.

(Publicado en el blog País Bizarro el 24 de octubre de 2012.)